Ciudad de México.- Usar jeans ajustados o decidirse por un corte de cabellos muy moderno puede salir muy ‘caro’ para los habitantes de Corea del Norte de ahora en adelante.
En las últimas horas, el régimen de Kim Jong-un, nieto del fundador del país Kim Il Sung, prohibió, de forma radical, entre otras cosas, el uso de este tipo de prendas de vestir en las que se puede resaltar la figura humana, como estrategia para combatir y mantener a su país libre de lo que llama la “decadente tendencia de la moda occidental”.
La información fue divulgada la semana pasada por el diario oficial del gobierno de Corea del Norte, el Rodong Sinmun, según reseñaron varias medios internacionales. La decisión gubernamental indica que las prohibiciones se hacen para evitar a toda costa una posible “invasión capitalista” en el país asiático.
Además de los jean ajustados, las nuevas disposiciones prohíben el uso de cortes de cabellos muy modernos, especialmente los conocidos como “salmonete”, que es con el pelo muy corto en la parte delantera y en los laterales, y muy largo en la parte trasera de la cabeza, muy popular en distintos lugares del mundo.
En resumen, Kim Jong-un declaró como ilegales y no apropiados todos aquellos cortes de cabellos diferentes a los 15 establecidos como “socialistas” por su régimen comunista. Esto incluye no poder tinturarse el cabello o algunas de sus puntas, según lo difundió después la organización Liga Juvenil Patriótica Socialista, que funciona como una especie de cuerpo de policía o vigilancia de la forma en que se visten los jóvenes en las calles y quienes habitualmente censuran todas aquellas prendas de vestir o modas que les parezcan “demasiado extranjeros”.
En el artículo del diario oficial también se hizo un llamado enérgico a la población a que sean cautelosos y luchar contra las más mínimas influencias de una “vida capitalista, para sí deshacerse fácilmente de estas”.
Entre las nuevas disposiciones también están el uso de cualquier tipo de piercings en partes del cuerpo, como los labios y la nariz, y las camisetas o suéteres de marcas reconocidas en el mundo occidental. Estas se suman a las decisiones anunciadas por el régimen en contra de las bandas de K-pop de origen surcoreano.
Corea del Norte no pasa por sus mejores días. El mes pasado el propio Kin Jong-un dijo que el país iba a afrontar “tiempos difíciles” e hizo alusión a la fuerte hambruna que padeció en los década de los años noventa, debido a la caída de la Unión Soviética, su gran aliado. Lo que llevó a esta nación a un periodo de declive económico que, sumado a desastres meteorológicos, provocó una grave escasez a la que se le atribuyen hasta tres millones de fallecidos.
Durante una reunión con líderes del partido único, Kim advirtió al resto de funcionarios de los “obstáculos y dificultades” que se avecinan, hasta el punto de que les ha llamado a prepararse para “otra ‘ardua marcha’ más difícil”, con el objetivo de aliviar en última instancia el potencial sufrimiento de la población, según la agencia de noticias surcoreana Yonhap.
“Nuestro partido no espera que lleguen oportunidades repentinas para allanar el camino a nuestro pueblo y cumplir el grandioso objetivo y el ideal de construir el socialismo y el comunismo”, aseguró el dirigente en su discurso, en el que ha llamado a ser “luchadores” frente a lo que pueda estar por venir.
Corea del Norte se ha blindado aún más desde el inicio de la pandemia de coronavirus, a pesar de que no ha reconocido oficialmente ningún contagio. Lastrado por las sanciones en estos últimos años, el país atraviesa una situación preocupante en materia humanitaria, según las pocas organizaciones que tienen información.
Fuente: SEMANA.