Redacción
Apaseo el Grande, Gto.- En un esfuerzo por reducir la contaminación del Río Apaseo, conocido también como Río Querétaro fuera de los límites municipales, el gobierno de Apaseo el Grande ha iniciado un innovador proceso de auto-saneamiento del río mediante la aplicación de enzimas y microorganismos.
Este enfoque natural busca disminuir gradualmente los niveles de contaminación en el cauce que se originan tanto en la zona industrial de Querétaro como en las comunidades aledañas de Apaseo, las cuales vierten sus aguas negras en el río. Este esfuerzo cuenta con el apoyo del Tecnológico de Celaya.
Francisco Javier Cañada Melesio, director de Desarrollo Agropecuario y Agrario, explicó: «Estamos iniciando un proceso para el auto saneamiento del Río Apaseo. Este es un proyecto que copiamos de Querétaro, donde ya se está implementando, utilizando un esquema sin plantas de tratamiento, aplicando enzimas y microorganismos directamente en el río».
Cañada Melesio detalló que ya se han realizado cuatro aplicaciones y esperan ver resultados pronto, especialmente en la eliminación del mal olor y en la recuperación de la transparencia del agua. «Básicamente, los ríos pueden sanearse a sí mismos siempre y cuando no se les eche demasiada mugre. Al saturar el río, la contaminación se acumula. Estamos potenciando las bacterias con estas enzimas y microorganismos para que realicen el proceso de destrucción de la materia orgánica, su transformación y la limpieza del río».
El proceso ha comenzado por el tramo de Las Adjuntas y, debido a limitaciones de recursos, solo se está cubriendo aproximadamente un 25% del río inicialmente. Sin embargo, Cañada Melesio confía en que la limpieza de esta parte tendrá un impacto positivo en el resto del cauce.
Cañada Melesio también hizo un llamado a la ciudadanía para que deje de contaminar el río y evite utilizar su agua para riego de cultivos hasta que esté tratada adecuadamente. «Invitamos a la gente a colaborar con el saneamiento para que el agua cumpla con las normas específicas y pueda ser utilizada en mejores condiciones», señaló.
En cuanto a los desafíos, destacó que la contaminación de las industrias en Querétaro, que incluye metales pesados, es una preocupación mayor. «La materia orgánica puede ser tratada más fácilmente, pero los metales pesados son más difíciles de limpiar. Algo se logrará, pero no sabemos en qué proporción», indicó.
El proyecto tiene un mes en marcha, con aplicaciones cada viernes y monitoreo constante por parte del Tecnológico de Celaya. «Ellos hicieron el análisis de la primera muestra del agua y serán quienes evalúen la efectividad del proyecto. Si logramos reducir la contaminación en un 30%, será positivo; si es un 50%, excelente, y si logramos más, será un éxito», concluyó Cañada Melesio.