Redacción
San Miguel de Allende, Gto. – Durante la marcha del orgullo LGBT celebrada el fin de semana pasado en San Miguel de Allende, surgió una controversia entre miembros del colectivo Colores y elementos de la policía municipal, quienes impidieron el acceso de bocinas al jardín principal. El colectivo calificó estos actos como represivos y exigió una disculpa pública.
La marcha, llevada a cabo el 13 de julio, inició en el Parque Juárez con destino al jardín principal. Nora Garibaldi, integrante del colectivo Colores y organizadora del evento, relató que la marcha transcurría con normalidad hasta que llegaron a la reja de San Francisco, donde les impidieron el paso con una camioneta que llevaba el sonido. Ante esta situación, los manifestantes tuvieron que continuar sin sonido.
La situación se intensificó al llegar a la parroquia, donde Garibaldi solicitó apoyo para ingresar el equipo de sonido a pie, pero una barrera de mujeres policías se los impidió. Según Garibaldi, las oficiales argumentaron que no tenían permiso para permitir el paso del equipo, lo que resultó en un altercado verbal y físico. Finalmente, después de dialogar con una encargada de la policía, se les permitió ingresar las bocinas y continuar la marcha.
Garibaldi también señaló que, aunque el municipio les prometió apoyo, les pidieron cambiar la ruta, lo que generó desconfianza en el colectivo sobre el verdadero respaldo de las autoridades. Estos incidentes fueron documentados por varios medios de comunicación y personal de la Procuraduría de los Derechos Humanos del Estado de Guanajuato, quienes acompañaron la movilización.
En respuesta a estos hechos, la Alianza Mexicana de Marchas LGBTTTIQ+ (que agrupa a más de 150 marchas y comités en todo el país) emitió un comunicado expresando su solidaridad con el colectivo Colores y la marcha del orgullo LGBT en San Miguel de Allende. La Alianza solicitó al Ayuntamiento de San Miguel de Allende:
Una respuesta inmediata explicando los actos de represión.
Disculpas públicas ante la población LGBTTTIQ+.
Compromiso en garantizar el respeto de los derechos humanos y constitucionales, y en la creación de políticas públicas al respecto.
Capacitaciones intensivas en materia de derechos humanos, cívicos y políticos de las poblaciones sexo-genéricas para todo el personal del ayuntamiento y dependencias.
Apertura de canales de diálogo para construir juntos una sociedad inclusiva e igualitaria, generando espacios seguros para la población LGBTTTIQ+.
El comunicado concluyó con un mensaje de apoyo y respaldo al comité organizador de la marcha, al colectivo Colores y a toda la población LGBT+ de San Miguel de Allende, asegurando que no están solos y que continuarán luchando hasta que sus derechos sean plenamente reconocidos y la dignidad se haga costumbre.